Realmente encuentro un trocito de mi Cuba en este lugar y me traen a la mente muchos recuerdos de mi infancia con cada cosa. Los productos siempre son de alta calidad, lo que se corresponde con el precio, algo elevado, debido a la exclusividad. El personal es amable y servicial la mayor parte del tiempo; solo necesita capacitación para ofrecer un servicio al cliente más acogedor y mejorar la experiencia desde el momento en que entramos, y no es precisamente al estilo cubano. En resumen, 100% recomendado.